lunes, 11 de octubre de 2010

Odio sentirme tan débil solo porque andes cerca. Y ni siquiera "cerca". No, esto no puede considerarse cerca. Es tan patético que me da pánico mirarme al espejo.
Quizá sea porque te recuerdo como el mejor recuerdo de mi vida. Ningún viaje se te acerca ni de lejos, ningún momento.
No eres tu, es que es tu recuerdo. El recuerdo de mi amor por ti. Supongo que es eso que dicen "Te has enamorado alguna vez? Pues no lo sé. Créeme, si lo hubieras hecho lo sabrías."
No recuerdo haberme enamorado de ti, sino de la imagen que yo me hacía de ti. Y era la mejor imagen que había visto nunca. Y que quizá veré, no por algo puedo presumir de imaginación.


No hay comentarios: